Ir al contenido principal

Renacer


En la inocuidad de la eternidad imagine un cielo sin colores, blanco e inmaculado, a veces negro sin sombra, falto de toda luz, a veces azul profundo, simple, perfecto, rojo lleno de furia de la soledad, a veces verde con la esperanza del abandono.

En la inmensidad de un grano de arena cabe el océano de la tristeza, en el arcoiris monótono existe la luz que circunda y que ilumina el tiempo infinito que mato segundo a segundo.

En lo profundo de la galaxia esta una enana blanca remanente de un sol morado, rodeado de quartz esperando ser absorbido por alguna galaxia nueva, emergente, que se llene de las partículas de la vieja estéril y muerta.

En el cajón de los recuerdos apareces tu, trayendo las vidas pasadas como fantasmas que se niegan a morir del todo, en el péndulo del metrónomo hicimos terraformacion para crear un nuevo planeta, flores, atmósfera, plantas, solo los dos, pero el metrónomo se detuvo, el planeta se seco y solo quedo el recuerdo de una mañana que ayer murió.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ni los que están ni los que vienen

Este es un escrito propio refleja mi pensar y espero no herir susceptibilidades. He comenzado este post con la aclaración porque sé que a muchos no les caerá en gracia pero solo trato de mostrar una realidad que es evidente y que es una dolorosa verdad. En Colombia somos hermanos de Venezuela, estuvimos unidos por mucho tiempo y hemos llevado caminos paralelos que parecen querer terminar en una situación semejante, he estado investigando acerca de las razones que han llevado a la actual situación y tratare de explicar mis conclusiones. Un resumen de historia social: En un boom petrolero Venezuela empezó a despilfarrar sus recursos, dejo de producir y empezó a comprar "en la calle" lo que podía tener en "casa" creo un centenar de subsidios al pueblo y lo acostumbró a darles todo. Cuando el petroleo empezó a decaer en vez de detener el gasto público (Principalmente el montón de subsidios) lo mantuvo y el país se desangraba poco a poco, ademas su sistema de g...

Ángel de la noche - 20

Luego de tantos años esperando conocer mi lugar en el mundo, viviendo en este espacio terrenal sientiendo que era un desperdicio de espacio, de aire y un ser que contamina mas de lo que ayuda, habia por fin sucedido, mi vida habia cambiado, habia viajado en el tiempo, habia conocido que no era una humana normal, habia sentido una furia asesina, me habia encontrado con unos saltadores de tiempo, le habia conocido a el y habia conocido al que eran realidad los padres verdaderos de mi alma, me encontraba confusa y ahora en medio de la nada, sobre un lecho duro de piedra, la mujer mas despampanante del que se tenga historia, estaba a punto de contarme algo unico, frente a mi, estaba mi padre, ahora se veia como un hombre palido de mediana edad, atractivo, recoredaba a los nosferatu de las peliculas, claro no como Eduard Cullen, mas bien como Louis o Lestat, incluso como Damon, aunque mas acuerpado, con su aparente metro noventa y toda su aura haria correr a cualquiera menos a mi, yo me ...

Los celos y otros demonios (En la amistad) - Parte 2

Anteriormente había hablado acerca del monstruo de los ojos verdes, cupido cuando se vuelve dark, había hablado de los celos en la relación.   Es un tema que tiene mucha tela por cortar, ya que los celos van desde los "normales" o el hecho de decir: "¿Si tenemos una relación de pareja exclusiva, que haces poniéndole ojitos a otr@?".   Toda relación es una serie de acuerdos que se deben respetar para evitar problemas o conflictos en la convivencia. Sin embargo, este tipo de situaciones no solo se presentan en las parejas románticas, el celo como tal se puede presentar entre parientes o entre amigos, está dado en ese afán que tenemos de proteger y cuidar aquellos por los que sentimos una conexión sentimental no necesariamente sexual. Cuando hablamos en un sentido puro de celar a alguien, hablamos de un cuidado especial, revisar si ha comido, si ha tenido un buen día, de reír y disfrutar su compañía, desearle buenas noches y buenos días, sin ser necesario ...